AVANCE ISLAMISTA EN EUROPA

Reitero lo que he publicado en mi libro Islam, el Azote de Dios, ahora en amazon: El islam es radical por naturaleza. En un estudio exhaustivo del Corán, sin necesidad de complicadas interpretaciones, se entiende claramente el mandato de Alá a sus seguidores de combatir por su causa, que es la de matar judíos y cristianos porque éstos contaminan la tierra. Lo que está ahora pasando en Bélgica y en muchos países europeos, es solo la señal del fortalecimiento de la religión del Islam tal y cual como fue enseñado y predicado con la espada por el profeta Mahoma, que según las profecías bíblicas ha de ocurrir en estos tiempos señalados como tiempos del fin. Es solo cuestión de tiempo la contaminación del  fervor religioso para que los musulmanes moderados se radicalicen. El Islam está llamado a contender en contra del judaísmo y el cristianismo y vencerlos por el poder de la violencia y el terror, que son las armas aprobadas por Alá para la islamización global.

En RT Sepa Más, sale publicado hoy:

“¿ISLAM CONSERVADOR ES TAN PELIGROSO COMO LO PINTAN?

La presencia de un grupo de islamistas radicales ha sembrado pánico en una pequeña localidad belga

Publicado: 18 jul 2012 | 8:13 GMTÚltima actualización: 18 jul 2012 | 12:00 GMT  

El movimiento salafista cobra auge en varias países europeos, sin embargo los expertos aseguran que no necesariamente es violento.

Varios habitantes de la ciudad belga de Droixe se quejan de que su vida se ha convertido en un infierno por la presencia de un grupo salafista que propugna el Islam radical.

"Tengo miedo por mis hijos, porque cuando toco música, ellos vienen y me acosan. No es normal. Ellos están alrededor de mis hijos, y eso me molesta", se queja uno los residentes de la ciudad.

La indignación ha crecido tras la publicación en los medios locales de que en la urbe reside una organización Markaz Attawhid desde hace tres años. Los peridistas locales citan una fuente anónima, que señala que la organización fue fundada por dos hermanos que estudiaron en Arabia Saudí y profesan la forma del Islam que es peligrosa de la misma manera para los musulmanes y para los demás. Sin embargo, los expertos advierten que no hay que medir a todos los practicantes de esta fe, por el mismo rasero.

“Es difícil por los salafistas - aquellos que son radicales, por supuesto - pero no todos son terroristas. Tenemos que hacer una distinción clara entre ellos. Hay otro movimiento, el muy conservador llamado Thabli. Ellos son muy conservadores pero no son violentos”, explica Simon Peterman, director del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de Lieja

"Salafismo no es un llamamiento a la guerra, ni a la yihad... Es todo lo contrario"

El islamismo radical últimamente recibe más atención por parte de los medios de comunicación. El informe más reciente de la inteligencia alemana señala que el salafismo es el movimiento islámico con el más rápido crecimiento en el mundo, y que lucha - y a veces lo hace por medio de violencia - por reemplazar a las legislaciones nacionales con las leyes de charía.

Sin embargo, Abdel Kader, teólogo del Centro islámico, emir de la mezquita principal en Bruselas y salafista - explica que las acciones de una minoría, generan confusión en la manera de cómo son percibidos los musulmanes.El emir recalcula que “salafismo no es un llamamiento a la guerra, ni a la yihad, no es pedirle a la gente que esté llena de odio. Es todo lo contrario. Salafismo es una religión. En cuanto a los extremistas, los podrá encontrar en todas las religiones. Y nosotros que somos los moderados, estamos en el centro”.

Las autoridades y los expertos coinciden en que el desafío principal consiste en identificar a los grupos radicales potencialmente violentos, para interceptar el proceso de radicalización de los jóvenes - antes de que sea demasiado tarde”

Si los europeos y el resto de la mayoría de los seres humanos estuviesen atentos a lo que proclaman las profecías bíblicas no estarían tan desprevenidos como es el caso del director del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de Lieja, quien no ve ninguna amenaza en el islam “moderado” de los salafistas, por cierto una de las ramas más radicales del islamismo.

Los países occidentales deben estar atentos a lo que está sucediendo en países como Bélgica, en los cuales un grupo relativamente pequeño de radicalizados islamistas, intentan imponer sus creencias extremistas al resto de la población. Esta estrategia irá en aumento hasta provocar la respuesta que ellos buscan: “la prohibición y persecución de ciertas ramas del islam”, para invocar entonces la intolerancia en Occidente al libre ejercicio de conciencia religiosa y justificar sus actos de violencia en contra del sistema político que los ha acogido en su seno.

Las autoridades en nuestros países quieren ignorar la agenda abierta que tienen los islamistas de islamizar a todos los países del orbe y de combatir en contra de los herejes, apóstatas, infieles, politeístas, idólatras, etc. Que son algunos de los calificativos que le dan a los países cristianos, a los cristianos y a los judíos.

El Islamismo está identificado en el Apocalipsis 13 y en el libro de Daniel, como la bestia que se ha de levantar en los tiempos finales a dominar los reinos de este mundo y hacer la guerra en contra del pueblo de Dios y vencerlos, hasta que a su vez sea vencido por el Hijo del Hombre, El Cordero que fue Inmolado, el Verbo de Dios, el Rey de Reyes y Señor de Señores, el Hijo de Dios, nuestro Señor Jesucristo, quien Retornará desde las nubes del cielo a vencer a los que destruyen la tierra e intentan destruir a Israel.

La humanidad quiere ignorar que la última gran batalla de los hombres, será una batalla religiosa, una batalla entre dos revelaciones totalmente diferentes: la revelación de Alá a su profeta Mahoma y la Revelación del Dios de Israel, dada a su pueblo. De esto trata el Apocalipsis.